A medida que el tiempo avanza, determinados torneos comienzan a transformarse en clásicos, empiezan a escribir su historia y de alguna manera ésta misma, los jerarquiza.
El puntapié inicial lo da una idea, luego la aventura es echarlo a andar, y luego hacerlo permanecer en el tiempo.
El cálido torneo Caballo de Troya que comenzará su edición número sexta el próximo viernes 23 de setiembre, ya tiene antecedentes que todos los que lo vivieron lo recuerdan con sumo agrado, y al repasar detenidamente las crónicas de los momentos en que esos torneos llegaban a su fin, se vuelve a vivir ese clima que dificilmente se repita en otro entorno.
Aquella primera edición que tuviera su punto final en julio del 2009, tuvo a Martín Areán como campeón conquistando cinco puntos y medio en seis partidas transcurridas durante un invierno muy crudo.
Las fotos de aquel día en que se entregaban los premios nos muestran a una Andreína Quevedo mucho más diminuta que la hermosa joven en la que se ha convertido en el presente y a un Emiliano González con algún quilito más que en la actualidad.
Cuando el tiempo mejoró y el verano luchaba por hacerse presente vino la segunda edición donde el pedrense Mario Ramírez obtenía muy merecidamente la corona. En aquel noviembre las imàgenes nos muestran a la querida Casa de la Cultura siendo nuevamente la anfitriona de todos los que la ocupaban viernes tras viernes.
Se fue ese año, pasó el calor, y nuevamente la estación más fria del año nos trajo una nueva emoción. La tercera edición decía presente para calentar las noches sauceñas.. Ese junio del 2010, el evento se realizó en un coqueto pub del pueblo canario. Podía cambiar el lugar, pero estaba decidido que ningún obstáculo haría detener el impulso del bravo corcel. El máximo lauro fue a parar en esa oportunidad a las manos de Antonio Fernández, quien dejó claro en todo el transcurso del torneo, de porque era el favorito.
Cinco meses después, y ya sin camperas, bufandas ni gorros, Mario Ramírez se dio el gusto en esa cuarta edición de alcanzar el bi-campeonato. Noviembre de 2010 quedará marcado como la primera vez que un jugador accedía al trofeo mayor de forma reiterada. Repasar la exquisita pluma de Aniel Carnebia ilustrando de forma magistral el cierre de aquella jornada, es un deleite más que nos podemos dar en el repaso que estamos efectuando.
Y este año llegó la quinta edición, primera en realizarse en mes de abril y primera en ser conquistada por un ajedrecista en permanente evolución y que deseamos se haga presente nuevamente para defender el logro conquistado: Leonardo Ponce.
Queda poco, la lista ya esta armada y solo espera crecer.
Este pueblo que se está convirtiendo en muy fermental en todo lo que a ajedrez se refiere, vería con ojos por demás agradecidos que todos pusieran su grano de arena para que esta sexta edición pasara a la historia por verse desbordante de gente.
El viernes 23 se levanta el telón.
De que lado de la fiesta estarás vos?
La mirarás de afuera o serás parte de la historia?
¡Sumate, seguro lo pasarás muy bien!
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